“No necesitamos tanta ayuda económica, si bien nos viene bárbaro, sino que nos interesa también la colaboración humana. El hecho de que los vecinos pasen por el taller y nos den una mano pintando o simplemente compartiendo algo con los chicos para nosotros es más que suficiente”, explicó Andrea Gianini, directora del Taller Protegino.

Con estas palabras la dirigente de la entidad argumentó la necesidad que tiene el Taller agregando que siempre es bienvenida la colaboración de la comuna, de todo tipo.

“Hemos hablado en todas las esferas y si bien recibimos colaboración siempre estamos necesitando de Salto. Tenemos presupuesto para 22 chicos y en el Taller damos de comer a más de 40”, argumentó.

En este sentido cabe aclarar que el Taller Protegido cuenta con un presupuesto que se ha quedado en el tiempo y sumado a eso, hoy es uno de los pocos que da alimentación a las personas que allí se albergan.

La institución de barrio Trocha brinda un servicio a la comunidad produciendo dulces, bolsas y vitro fusión. Con ello las autoridades tratan de palear las necesidades que día a día se presentan pero hay que dejar en claro que no es suficiente lo que se recauda.

“Lo que pedimos es que la comunidad pase y vea cómo están los chicos, cómo se trabaja y qué se necesita. Luego de eso el que pueda que ayude pero en primera instancia queremos que conozcan el lugar”, cerró Gianini.