El personal de Servicios Sanitarios realizó un operativo de limpieza en el Pozo de Agua N°7, ubicado en la calle México, y se encontró con un escenario preocupante: basura acumulada, instalaciones dañadas y hasta dos árboles arrojados en el sector.
Desde el área advierten que la falta de responsabilidad por parte de algunos vecinos no solo dificulta las tareas de mantenimiento, sino que también afecta el suministro y la calidad del servicio de agua potable.
Si bien el personal municipal realiza limpiezas periódicas, la constante acumulación de desechos genera complicaciones en la infraestructura y podría derivar en problemas de abastecimiento.
Las autoridades instan a la comunidad a cuidar los espacios comunes y a denunciar cualquier hecho de vandalismo que comprometa el bienestar de todos.