Vivir en una sociedad con otras personas implica ciertos derechos, pero también responsabilidades a las que debemos atender. Entre estas, una de las fundamentales es hacernos cargo de nuestros bienes ante el resto frente a cualquier eventualidad.
La forma de hacerlo es teniendo estos bienes a nuestro nombre, algo que muchas veces se evita por diversos motivos. Pero esto puede convertirse en un problema, sobre todo si ignoramos los diferentes tipos de consecuencia que puede implicar.
En los puntos que siguen a continuación, hablamos acerca de cinco cosas que es necesario tener a nuestro nombre para evitar problemas.
Uno de los bienes más importantes que es necesario tener registrado es el auto. Contar con el título del automotor a nuestro nombre es fundamental para poder usarlo y circular con tranquilidad.
De esta manera, somos responsables de todo lo que suceda con nuestro auto siendo dueños y evitamos cualquier tipo de inconveniente que no tenga que ver con nuestro uso. Por eso es fundamental, cuando se trata de autos usados, realizar el cambio de titularidad.
Igual de importante que el auto, si somos dueños de una casa también es fundamental contar con la titularidad de esta. El pago de impuestos y las responsabilidades que implique correrán por nuestra cuenta, pero también tendremos el beneficio de la propiedad.
Con este título, nadie podrá reclamar nada sobre nuestra casa y además evitaremos inconvenientes tan complicados como un desalojo. Por otro lado, en términos monetarios es un bien de mucha importancia sobre el que es recomendable tener propiedad legal.
Esto es fundamental para poder tener una vida financiera activa, que nos permita el manejo de dinero necesario para los diferentes aspectos de nuestro día a día. En términos laborales, será la principal forma para que podamos cobrar por lo que hacemos.
Con una cuenta bancaria a nuestro nombre, se nos permitirá la compra de bienes y servicios de forma segura. También podremos acceder a créditos y diferentes tipos de préstamos que pueden resultarnos útiles para nuestro proyecto de vida.
Más allá de los bienes sobre los que uno tiene propiedad, también es bueno tener a nuestro nombre otras cosas como los contratos de alquiler. Quizás no tengamos la fortuna de ser dueños del lugar donde vivimos, pero sí podemos ser los titulares del contrato de alquiler.
Teniendo el contrato a nuestro nombre podremos presentar los diferentes reclamos que creamos convenientes y exigir los derechos que nos corresponden. También es nuestra forma de respaldar el uso que hacemos del lugar.
Finalmente, también es muy importante dentro de la vida de responsabilidades que tenemos en sociedad contar los servicios a nuestro nombre. No importa si son de gestión pública o privada, tener la titularidad de estos es clave para encargarnos de su gestión.
Así podremos hacer reclamos ante cualquier tipo de mal funcionamiento y exigir la solución que sea necesaria. También evitaremos cortes o que el servicio sea dado de baja sin que sea nuestra decisión.
