Dante Paunero es un tucumano de 71 años que vive la fe por la Virgen de Luján de una forma muy personal: peregrinando.
El 2 de abril salió desde su casa ubicada en Manantial, al sur de Tucumán, con un objetivo: caminar los 1206 kilómetros que separa ese pueblo de la Basílica de Luján.
“Yo tengo un problema en mi talón, camino y me lastimo, pero peregrinando a Luján nunca me lastimé”. Así comenzó Dante su relato, cuando Salto Ciudad lo cruzó caminando por la Ruta 31 en compañía de Estela, peregrina de la vecina localidad de Rojas.
El “abuelo de la fe”, tal y como ya ha sido bautizado por los fieles, camina diariamente 20 kilómetros y a las 15 horas detiene su peregrinar para rezar la Coronilla de la Divina Misericordia.
Dante es sencillo, amable, y cada persona que lo cruza, le alcanza agua y le da un lugar para dormir.
Este jueves 16 de junio llegará a Salto, donde será recibido por un grupo de peregrinos locales, que lo acogerán para pasar la noche en la ciudad y luego continuar viaje hacia la Capital de la Fe.