Aseveran que fue un “femicidio”

A dos años de caso de Solange Ortiz, sus familiares continúan reclamando justicia

Reclamo en la jornada del sábado 13.
Reclamo en la jornada del sábado 13.
El dolor no cesa.
El dolor no cesa.

A dos años del hallazgo del cuerpo sin vida de Solange Ortiz, la joven que fue enterrada en el patio de una vivienda, sus familiares se concentraron frente a la casa de Andrés Retamal, a quien acusan de haberla asesinado. 

El tiempo pasa, pero la herida aún no cierra. El pedido de justicia por parte de los familiares de Solange "Luli" Ortíz, la joven que en aquel entonces tenía 26 años y que en febrero del 2019 fue hallada enterrada en el patio de una casa ubicada en calle Cristóbal Colón 61, sigue más latente que nunca. 

Si bien el informe acerca de los resultados de la autopsia practicada al cuerpo de Ortíz arrojó que la joven murió a causa de una sobredosis de drogas, sus familiares, sostienen que se trató de un “femicidio”.

El sábado 13 de febrero se realizó una concentración en la esquina de América y Cristóbal Colón, el mismo lugar en el que Andrés Retamal y Antonela Celi, sin piedad alguna, enterraron el cuerpo de Solange.

“Para los jueces ni siquiera hubo abandono de persona, por eso la bronca, la impotencia y el dolor”, sostuvo Cintia Rojas, hermana de Ortíz.

“Sufrimos de maltrato policial, a tal punto que dos policías llegaron a decirle a mi madre que ‘mejor que Luli esté muerta porque se drogaba’. ¿Qué clase de mujer te dice eso?”, se preguntó Cintia, completamente indignada por lo que en su momento le habrían manifestado dos uniformadas a Sonia, la madre de Solange. 

Durante la concentración, que estuvo celosamente custodiada por efectivos de la Policía de Salto y personal del grupo de Infantería, Cintia denunció que a dos años del caso, Andrés Retamal – único detenido al día de la fecha, ya que su novia y partícipe en ocultar el cadáver de Ortiz, Antonela Celi, recuperó su libertad – le envía mensajes desde la cárcel, asegurando que “Retamal y Celi viven en su impunidad”.

“El Estado mata porque está ausente. No es necesario hacer una marcha cada dos años, hay que juntarnos siempre, todas las mujeres. Tenemos que reunirnos una vez al mes y reclamar por Johana, Luli, Úrsula y todas aquellas mujeres que no tienen que justicia. No tenemos que esperar a que haya más muertes. ¿Para qué carajos sirve la perimetral si la policía no llega a tiempo?, se preguntó Rojas, haciendo clara referencia al caso de Úrsula Bahillo, la joven asesinada por su expareja Matías Ezequiel Martínez.

Respecto al caso de Ortiz, Cintia afirmó que la investigación fue “cerrada” y que Sonia, su madre, decidió salir a exigir justicia por “todas las mujeres”. 

EL HALLAZGO

Sonia, la mamá de Solange, había visto a su hija por última vez el jueves 7 de febrero, pero comenzó a buscarla por sus propios medios el sábado 9 y, al no tener resultados recurrió a la policía. Según Sonia, inicialmente no se preocupó por el regreso de su hija porque, en otras ocasiones, se había ido de su casa sin avisar. Desde el sábado (9 de febrero) a la tarde que empecé a llamar, a moverme y nadie la había visto. Empezamos la búsqueda con mi hija, hasta que encontramos el audio que decía que iba a lo de Retamal", había contado la madre de la víctima en aquella oportunidad.

Sonia había informado a la Policía del mensaje de su hija y, por orden del fiscal de la causa, Pedro Illanes, se allanó la casa de Retamal. El sospechoso no estaba ahí, pero los agentes encontraron el cadáver de Ortiz debajo de una franja de tierra removida, de la cual sobresalía una parte del cuerpo. Illanes dispuso que hoy mismo se realizara la autopsia en los laboratorios de la ciudad de Junín.

Luego de analizar el teléfono de Ortiz, los investigadores determinaron que la joven de veintiséis años había sido contactada por Antonella Celi, la pareja de Retamal. Celi fue detenida poco después del hallazgo del cuerpo y aseguró que ella y su novio habían mantenido un encuentro sexual con Ortiz, durante el cual consumieron drogas. Según el relato de Celi, la víctima se descompuso y murió". Sin embargo, los familiares de la víctima niegan que "Luli" haya muerto por sobredosis y a un año del hecho insisten en que fue asesinada de "un mazazo en la cabeza" y luego enterrada por Retamal.

"Anoche con la poca fuerza que tenía fui a reconocer el cuerpo, mi hermana murió de un mazazo en la cabeza, no murió de sobredosis", afirmaba en aquel entonces Cintia. 

LA DETENCIÓN DE RETAMAL 

Retamal había huido al enterarse de que la Policía estaba buscando a Ortiz. Horas más tarde fue detenido en un hotel de la ciudad Luján. Los efectivos encontraron que tenía un revolver Ruby Extra calibre .38 con seis cartuchos.

CELI, LIBRE. RETAMAL, PRESO

A dos años del caso que conmovió a la opinión pública, Andrés Retamal continúa detenido en un penal bonaerense, mientras que su novia, Antonela Celi, recuperó su libertad. 

Familiares y allegados alzan su voz.
Familiares y allegados alzan su voz.
Pura impotencia.
Pura impotencia.

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